Trump firma dos órdenes ejecutivas que intensifican su arremetida migratoria Una de las órdenes busca ampliar las operaciones policiales para facilitar la detención de inmigrantes y la otra exige elaborar una lista de las “ciudades santuario” de inmigrantes que no colaboran con la agenda migratoria del Gobierno.
El presidente, Donald Trump, firmó este lunes por la tarde dos órdenes ejecutivas en materia de inmigración, para continuar la escalada de su Gobierno contra la inmigración.
Las órdenes ejecutivas buscan ampliar las operaciones policiales para facilitar la detención de inmigrantes y exigir a los funcionarios estatales y federales que elaboren una lista de las jurisdicciones o ciudades “santuario”
donde las autoridades a menudo no se concentran en hacer cumplir las normas federales de inmigración. En el caso de las ciudades “santuario”, la orden indica que “en un plazo de 30 días […], la fiscal general, en coordinación con la secretaria de Seguridad.
Nacional, publicará una lista de los estados y jurisdicciones locales que obstaculizan la aplicación de las leyes federales de inmigración (jurisdicciones santuario). Tras esta publicación inicial, la fiscal general y la secretaria de Seguridad Nacional actualizarán esta lista según sea necesario”.
El texto especifica que “con respecto a las jurisdicciones santuario designadas en virtud del artículo 2(a) de la presente orden, el jefe de cada departamento o agencia ejecutiva, en coordinación con el director de la Oficina de Gestión y Presupuesto y en la medida en que lo permita la ley,
identificará los fondos federales adecuados para las jurisdicciones santuario, incluidas las subvenciones y los contratos, a fin de suspenderlos o rescindirlos, según proceda”. Subraya que en los casos que las ciudades continúen desafiando las políticas federales, la Administración tomará todas las medidas legales y coercitivas necesarias para poner fin a estas violaciones y lograr que dichas jurisdicciones cumplan con las leyes de los Estados Unidos.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, afirmó antes de la firma que las ciudades “santuario” han hecho esfuerzos para “obstruir” la aplicación de la ley. “Estamos en las etapas iniciales de la mayor campaña de deportación en la historia de Estados Unidos”, añadió.
Una de las órdenes busca “fortalecer y dar rienda suelta a la aplicación de la ley en Estados Unidos para perseguir a los criminales y proteger a los ciudadanos inocentes”, señaló . La orden sobre las ciudades “santuario” insta a la fiscal general,
Pam Bondi, y a la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, a elaborar una lista de las jurisdicciones que, según el Gobierno, no colaboran en la aplicación de las leyes de federales de inmigración. Esas jurisdicciones podrían quedarse sin fondos federales y enfrentarse a posibles demandas penales y civiles si se niegan a colaborar con la agenda migratoria del presidente.
“Es bastante simple: obedezcan la ley, respeten la ley y no obstruyan a los funcionarios federales de inmigración y a los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley cuando simplemente están tratando de eliminar las amenazas a la seguridad pública de las comunidades de nuestra nación”,
dijo Leavitt, quien apareció junto a Tom Homan, el “zar” fronterizo de Trump. El anuncio de esta nueva orden ejecutiva se produjo días después de que un juez federal de California bloqueó el intento de la Administración de retener los fondos a las ciudades “santuario”, que limitan la cooperación con las autoridades de inmigración.
La Casa Blanca también destacó este lunes durante la firma de las nuevas órdenes ejecutivas el haber conseguido la cifra más baja de cruces ilegales en la frontera con México en décadas, mientras que Trump celebra los primeros 100 días de su segundo mandato.
La arremetida del Gobierno republicano en materia migratoria ha escalado en las últimas semanas, con la deportación exprés de cientos de inmigrantes a una prisión de El Salvador, y el arresto de una jueza acusada de obstruir el arresto de un inmigrante hispano.
Hannah Dugan, una jueza de condado de Milwaukee, fue detenida el viernes por el FBI por presuntamente obstruir a las autoridades federales que intentaban detener a un inmigrante indocumentado hispano.
El arresto ha vuelto a significar un choque entre el poder ejecutivo y el judicial en la presente Administración. Hasta este lunes, el presidente habría firmado más de 140 órdenes ejecutivas en sus primeros 100 días en el cargo, según la Casa Blanca.
Las órdenes en materia de inmigración han tenido un peso clave en la agenda del Gobierno. Encuestas recientes revelan opiniones divididas o negativas sobre su gestión en materia de inmigración, uno de los temas que impusló su campaña presidencial y su triunfo en las elecciones de 2024.